Hacer de tomar agua un hábito diario es un excelente paso para comenzar a sanar y poder adoptar un estilo de vida saludable. Tomar agua es necesario para muchos procesos vitales, el agua se ve involucrada en el transporte y absorción de nutrientes, en nuestra temperatura corporal, circulación, funciones neurológicas, digestión e incluso en los procesos de eliminación de toxinas.
Aunque la recomendación diaria es de aproximadamente 2 litros diarios, la cantidad que necesitamos ingerir varía de persona a persona. Para satisfacer las necesidades individuales, se deben tener en cuenta varios factores como: edad, estado de salud y alimentación. Por ejemplo, una dieta que incluye el consumo de frutas frescas y vegetales es alta en agua, contrario a una alimentación basada en alimentos procesados y empacados.
Para tener una idea más clara de cuánto necesitan les comparto esta fórmula:
Peso en libras/16 = cantidad de vasos de 250 ml que deben consumir al día. Por ejemplo, una persona con un peso de 115 libras:
115/16= 7 vasos de 250 ml.
Casos en los que el consumo de agua debe aumentar:
- Antes, durante y después de entrenar.
- Diarrea, vómito o estreñimiento.
- Enfermedad, fiebre o dolor de cabeza.
- Consumo de alcohol o café.
- Embarazo o lactancia.
- Infecciones urinarias.
- Altas temperaturas o humedad en el ambiente.
Ahora veamos cómo incorporar el agua de forma variada para completar fácilmente el requerimiento diario:
- Tomar un vaso con agua a temperatura ambiente al despertar. Esto le permitirá a nuestro organismo hidratarse después de haber trabajado toda la noche.
- Tomar jugos verdes y/o un batido. Conoce más de mis 30 recetas favoritas de jugos verdes y batidos.
- Tomar un vaso con agua por cada taza de café (no exceder de 2 tazas de café al día).
- Sustituir 1 taza de café al día por un té o infusión libre de cafeína. *La cafeína deshidrata.
- Tomar agua durante las comidas para mantenernos hidratadas, de esta forma evitamos llegar al tiempo de comida muertas del hambre y que terminemos comiendo calorías demás. Podemos llevar el agua a otro nivel y apoyar los procesos de eliminación haciendo “aguas detox”, solo debemos agregar al agua: jengibre, rodajas de naranja o pepino y hojas de albahaca o menta.
- Tomar una infusión calientita después de las comidas para apoyar los procesos de digestión. Mis favoritas son de jengibre, manzanilla y rosa jamaica.
- Incluir muchos vegetales de hoja verde en todos los tiempos de comida y comer fruta.
- Comer sopas y cremas.
Bajo el ejemplo anterior que da como resultado un requerimiento de 7 vasos de 250 ml, miren que fácil se puede completar con solo algunas de las opciones:
1 Vaso de 500 ml con agua a temperatura ambiente al despertar.
2 Vasos de 250 ml por las 2 tazas de café al día.
2 Infusiones después del almuerzo y cena 250 ml
250 ml durante el día.
¡Listo! Con este protocolo y añadiendo además vegetales, frutas, cremas y sopas pueden cumplir más fácilmente su ingesta diaria de agua.
Espero que este post las motive a tomar más agua y sobretodo a experimentar diferentes formas de incorporarla en su día a día. No olviden etiquetarme en Instagram como @mequierosaludable y utilizar los #tribumqs y #saludableyenbalance compartiéndome su experiencia.
Con cariño,
Fabi